Con Eva y Jesús es difícil parar de reir desde el primer momento. Son una pareja alegre, simpática y muy divertida. Y eso que Jesús es muy tímido, tanto que he decidido no publicar su preboda para que no se muera de la vergüenza. Pero no porque dijera cosas feas o hiciera el ridículo, que va, sino porque en una preboda a veces uno logra abrirse tanto y hablar tanto desde el corazón que luego le parecen palabras muy íntimas para que estén a la vista de todos.

La boda de Jesús y Eva fue como ellos, divertida y llenísima de cariño. Pronosticaban lluvia, la cruz de esta parejita (de hecho, la preboda la tuvimos que aplazar en varias ocasiones, una de ellas por la lluvia, y el día que la hicimos llovió), pero al final las oscuras previsiones se quedaron en unas nubes que embellecieron aún más la tarde. Hubo un momento, después de la ceremonia en que Rubén y yo nos miramos y supimos que estábamos pensando lo mismo: Va a quedar una boda bonita (por muchos motivos). Y efectivamente.

Gracias, chicos, por vuestra confianza. Gracias, Eva, por tu sonrisa y tu energía. Y a ti, Jesús, gracias por estar tan pendiente de nosotros, de que no nos faltara nada, de que estuviésemos agusto, de que cenásemos. No olvidaré el desfile de cocineros y camareros y los platos arriba y abajo a una velocidad vertiginosa trinchando los cochinillos con la precisión de la mano maestra.

Fue todo un lujo y un placer formar parte de vuestro Gran Día 😉

 

Highlights Eva & Jesús from Cristina Besnard on Vimeo.